Pautas para obtener la máxima rentabilidad de un inmueble
Como siempre decimos, no todo vale. El mercado de la vivienda puede ser un buen refugio. Por eso antes de invertir es bueno analizar la zona y el inmueble en su conjunto. Te damos algunas pautas para invertir en vivienda.
Estas son algunas preguntas clave:
¿Qué comprar y dónde? Este punto es fundamental sobre todo si la idea es destinar la vivienda al alquiler. Un buen análisis de la zona y sus perspectivas nos ayudará a no equivocarnos. Los pisos con buenas comunicaciones, servicios y dotaciones, se alquilarán mejor que las que se encuentren en zonas aisladas o problemáticas. Igualmente, las áreas donde se ubiquen los grandes centros de negocio, empresas y centros de formación universitaria, tendrán siempre demanda.
¿Qué tipo de vivienda es aconsejable? Depende del objetivo. Los dormitorios y el demandante potencial son la clave. El target es más temporal en la tipología de 1dormitorio. La vivienda más demandada está entre 2 y 3 dormitorios.
¿Cómo está la casa? ¿Necesita cambios importantes? ¿Qué servicios tiene? El garaje y el ascensor incrementan la rentabilidad, así como zonas comunes.
Rentabilidad bruta y neta. Para calcular la rentabilidad neta, de los ingresos brutos se deben descontar los gastos de la vivienda, tanto los asociados a la compraventa como los derivados de la propiedad, tales como la comunidad, el IBI, los seguros, los gastos de las reformas, incluido la hipoteca si la tuviera.
¿Cuánto debería revalorizarse para obtener plusvalías futuras? En caso de venta, además del precio debemos tener en cuenta los impuestos y los gastos del inmueble, tanto de la compra como de la venta.
Suscríbete: